9 Señales de fatiga crónica + cómo recuperar la energía

Después de años de trabajar con pacientes con fatiga crónica, he descubierto que hay esperanza de recuperación, y no es necesariamente lo que piensas.

Claro que dormir de 7 a 9 horas y comer los alimentos adecuados aumentará tus niveles de energía, pero estos enfoques no siempre son suficientes para lograr un cambio duradero.

Llegar a la raíz de tu fatiga crónica

Como médico funcional, creo que la fatiga crónica es más de lo que se ve a simple vista. El cansancio constante puede ser la forma en que el cuerpo pide a gritos tu atención, rogándote que vuelvas al camino de tu mayor fluidez y alegría.

Para llegar a la raíz de tu fatiga, es esencial que te preguntes qué necesita tu cuerpo para sentirse energizado a un nivel más profundo. Aquí hay algunas preguntas para considerar:

• ¿A qué le está diciendo mi cuerpo que no?
• ¿Dónde está mi vida respecto a mi verdad?
• ¿Qué valiente cambio de vida podría ser necesario para liberarme de la fatiga crónica y maximizar mis niveles de energía?

Las respuestas a estas preguntas pueden ser sorprendentes: puede que te des cuenta de que tienes que dejar tu trabajo, acabar con tu matrimonio tóxico, o finalmente tomar las medidas necesarias para perseguir tu visión.

El miedo suele ir de la mano de estas epifanías, pero cuando la gente tiene la fuerza para tomar medidas inspiradas en la dirección de lo que les hace cobrar vida, pueden producirse cambios radicales en la salud.

Aquí hay 9 sutiles signos de fatiga crónica que veo a menudo.

Si asientes con la cabeza mientras lees esta lista, probablemente sea una señal de que es hora de hacerse estas preguntas más profundas, así como de tomar las medidas estándar para promover el sueño como mejorar el ambiente de tu dormitorio, comer una mejor dieta o tomar suplementos relajantes.

1. Nunca te despiertas de forma natural

Las personas que están bien descansadas tienden a despertar espontáneamente. Si siempre te despiertas con un despertador, es posible que no estés durmiendo lo suficiente.

2. Te sientes cansado al despertar

Es normal sentirse un poco aturdido en esos momentos intermedios que rodean al despertar inicial, pero deberías empezar a sentirte con energía a los pocos minutos de salir de la cama. Si tienes que arrastrarte a través de tus rituales matutinos, puedes estar crónicamente fatigado.

3. Le temes al ejercicio

Cuando estás crónicamente fatigado, gastar energía extra en el ejercicio puede parecer imposible. Puede que te encuentres desanimado por cada sesión de gimnasio, o que simplemente las evites por completo.

4. Necesitas estímulos a lo largo del día

Si dependes del café o del azúcar para aumentar tu energía a lo largo del día, la fatiga crónica puede ser un problema para ti.

5. Evitas hacer planes o cancelas en el último minuto

Las personas con fatiga crónica tienden a ser poco confiables cuando se trata de compromisos. Como la fatiga puede aparecer en momentos inoportunos, pueden evitar comprometerse con los planes, o pueden tener la tendencia a abandonar en el último minuto.

6. Fantaseas con siestas

Si no puedes pasar el día sin dormir una siesta, tus niveles de energía pueden no estar optimizados.

7. Tu agotamiento es notorio para los demás

Pregunta a tus amigos si pareces cansado. Algunas personas son estoicas y puede que no lo mencionen, pero si estás crónicamente fatigado, es muy probable que tus seres más queridos lo hayan notado.

8. Tu vida sexual sufre

Es comprensible que cuando estás constantemente cansado, las relaciones sexuales pueden parecer menos atractivas que dormir. Si le dices que no a tu pareja, ciertamente puede haber otras cuestiones involucradas, pero la fatiga crónica es definitivamente complicada para la libido.

9. La mayoría de las veces te sientes estresado y ansioso

Todos queremos sentirnos bien durante las horas de vigilia, y si siempre te sientes cansado, esto puede predisponerte al estrés y la ansiedad.

Conclusión final

Cada uno tiene un propósito único que encontrar y cumplir. Cuando estás crónicamente fatigado, puedes sentirte fuera de contacto con la canción que estás aquí para cantar, y si eres consciente de cuál es esa canción, puedes estar demasiado cansado para hacerla realidad. Preguntarse dónde estás desequilibrado es el primer paso para recuperar tu energía y tu pasión.