¿Bebes suficiente agua?
Las siguientes diez cosas le suceden a tu cuerpo cuando la ingesta de agua es la adecuada.
1. Tendrás un ritmo regular
Es habitual sufrir un poco de estreñimiento si no se bebe suficiente agua. La inactividad, los cambios de dieta, las enfermedades e incluso el estrés pueden agravar el problema. El estreñimiento suele desaparecer por sí solo, pero puedes ayudar a que avance con ejercicio, medicamentos de venta libre y, por supuesto, agua.
Acude al médico si el estreñimiento dura más de una o dos semanas o si tienes mareos, un fuerte dolor de barriga o sangre en las heces. Podrían ser signos de algo más grave.
2. Tus articulaciones funcionan mejor
El agua constituye una gran parte del cartílago de las articulaciones, que ayuda a absorber los golpes y a suavizar los movimientos de hueso contra hueso.
El agua también puede ayudar a mantener a raya la gota (una dolorosa enfermedad articular). También ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo que podrían inflamar las articulaciones.
3. Sudas
¡Y eso es algo bueno! Cuando el sudor se evapora de tu piel, enfría tu cuerpo. Bebe un par de vasos de agua más en las horas previas al ejercicio. Intenta también beber unos 10 tragos grandes cada 15 minutos aproximadamente durante el entrenamiento. Recuerda que es posible que no veas el sudor que pierdes si estás en la piscina o en un gimnasio con aire acondicionado.
4. Evita la deshidratación
Sin suficiente agua, puedes sudar demasiado líquido. También puedes perder el sodio y el potasio que tu cuerpo necesita. Esto es especialmente cierto con el calor. Cuando esto ocurre, puedes tener sed, orinar menos de lo habitual y se te puede secar la boca. Incluso podría sentirse mareado, aturdido y confundido.
5. Tus riñones se mantienen más sanos
El agua ayuda a los riñones a eliminar los residuos de la sangre. Si no tomas suficiente agua, esos residuos, junto con los ácidos, pueden acumularse. Esto puede hacer que los riñones se obstruyan con unas proteínas llamadas mioglobina. La deshidratación también puede provocar cálculos renales e infecciones del tracto urinario.
6. Mantienes tu cerebro agudo
Es posible que no recuerdes tan bien, ni pienses con tanta claridad, ni te concentres tan fácilmente cuando tienes poca agua. Y no tienes que estar gravemente deshidratado. Puede ocurrir si sólo estás un poco por debajo de lo que deberías estar. ¿Cómo de poco? Menos de 4 vasos de agua en una persona de 68 kilos.
7. Puedes obtener una ventaja atlética
Incluso una deshidratación leve puede provocar cansancio. Por eso tiene sentido que los atletas que sustituyen el sudor que pierden por agua y electrolitos (minerales como el sodio y el potasio) tengan una temperatura corporal más baja, más músculo, un corazón más fuerte, más potencia cerebral y más energía. Todo ello se traduce en un mejor rendimiento.
8. Podrías perder peso
Las personas que toman sólo 2 o 3 vasos más de agua al día parecen tener menos grasa, azúcar, sal y calorías en general a lo largo del día. Eso significa que una hidratación adecuada podría ayudarte a perder peso.
El agua adicional puede sustituir a las calorías vacías y azucaradas que muchas personas toman con las comidas. El agua también parece acelerar el metabolismo y ocupa espacio en el estómago para que te sientas más lleno.
9. Tu corazón funciona mejor
Tu corazón no tiene que trabajar tanto cuando bebes suficiente agua. De hecho, incluso una deshidratación leve afecta a los vasos sanguíneos (haciéndolos menos elásticos) de la misma manera que fumar un cigarrillo. Escatimar en agua también hace que haya menos sangre en el cuerpo, lo que puede reducir la presión arterial y aumentar el ritmo cardíaco. Basta con 15 ó 20 minutos para que el agua sea suficiente para equilibrar las cosas.
10. Es menos probable que te desmayes
Es menos probable que te desmayes al donar sangre si has tomado suficiente agua. Lo mismo parece ocurrir si tienes cuidado de reponer el agua perdida a través del sudor o la orina. Cuando los niveles bajan un poco, tu presión arterial puede bajar y tu sistema nervioso no puede controlarla tan bien. Eso puede hacer que te desmayes. Ten cuidado con esto si hace calor en el exterior, y especialmente cuando hagas ejercicio.
¿Cuánta agua es suficiente?
Una buena regla general es 15 vasos al día para los hombres y 11 vasos para las mujeres. Pero ten en cuenta que eso incluye el total de líquidos. Entre el 20% y el 30% del agua proviene de los alimentos. Obtienes más de otras bebidas como zumos, té y leche. Si estás enfermo, necesitarás más (especialmente si tienes diarrea o vómitos). Si haces ejercicio o estás al aire libre cuando hace calor, procura también beber un poco más.
No tomes demasiada
Demasiada agua puede diluir la sal en la sangre lo suficiente como para enfermar (lo que se llama hiponatremia). Además, no debes excederte si tienes ciertos problemas de salud o tomas medicamentos que te hacen retener agua, como los AINE, los opiáceos, los antidepresivos u otros.
Bebe lo suficiente para mantener un ligero color amarillo en tu orina, pero no tanto como para que sea siempre clara, o para que te pases todo el día en el baño. Consulta a tu médico si no estás seguro.