La necesaria limpieza emocional
«Como una limpieza dietética, la limpieza emocional permite que el cuerpo emocional se restablezca a sí mismo, dejando ir la pesada carga tóxica y reduciendo el estrés de manera significativa«.
Tan importante como la desintoxicación física, una limpieza emocional liberará tu mente y tu cuerpo de formas que no puedes imaginar antes de hacerla. No siempre es fácil, pero nunca he conocido a nadie que haya seguido el protocolo y se haya arrepentido de hacerlo.
Más allá de los beneficios personales inmediatos, la limpieza emocional puede prevenir la aparición de enfermedades, ya que existen vínculos científicos entre la angustia emocional crónica o el estrés y las principales enfermedades de hoy en día.
Un estudio de Harvard de 1.305 hombres con una edad promedio de 62 años reveló que los hombres más enfadados tenían tres veces más probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas que los más tranquilos.
Según los investigadores del Centro de Cáncer Integral Jonsson de la UCLA, el estrés actúa como una especie de fertilizante que acelera significativamente la propagación y el progreso del cáncer de mama en los animales.
Las células inmunes, que normalmente protegen al cuerpo contra las enfermedades, se reprograman biológicamente a través del estrés en células que realmente ayudan a que los cánceres crezcan y hagan metástasis.
«…Encárgate de tu salud emocional. Procesa conscientemente tus emociones…»
En una revisión de la literatura científica sobre la relación entre el estrés y la enfermedad, el psicólogo de la Universidad Carnegie Mellon, Sheldon Cohen, ha descubierto que el estrés es un factor que contribuye a las enfermedades humanas, y en particular a la depresión, las enfermedades cardiovasculares y el VIH/SIDA.
SIN DUDA ALGUNA, EL ESTRÉS EMOCIONAL CRÓNICO CONTRIBUYE A LAS ENFERMEDADES MORTALES.
¡NO LO PERMITAS!
Como una limpieza dietética, la limpieza emocional permite que el cuerpo emocional se restablezca a sí mismo, dejando ir la pesada carga tóxica y reduciendo el estrés de manera significativa.
A menos que te comprometas consciente y deliberadamente en el proceso de limpieza emocional, estás dejando tu futura salud al azar. No dejes tu salud al azar.
Estas cinco acciones llamarán la atención sobre personas y eventos específicos, siempre errando en la expresión madura de sus emociones, en lugar de una expresión inmadura.
1. LIMPIAR LA IRA
Identifica a las personas con las que estás enfadado. Una vez identificadas, la receta te pide que escribas la expresión madura de tu problema (no la inmadura). Una vez que tengas clara tu posición adulta sobre el tema, el camino a seguir será obvio.
2. LIMPIAR LA CULPA
Identifica a las personas a las que has agraviado y a las que debes pedir perdón. Identifica específicamente lo que hiciste o cómo actúaste mal con cada persona y qué restitución, si la hay, consideras apropiada. Haz planes para actuar de acuerdo con tus ideas.
3. LIMPIA LOS RECUERDOS NEGATIVOS A LOS QUE TE AFERRAS
Escribe una lista de los recuerdos negativos que aún te molestan. Una vez que tengas tu lista, revisa cada recuerdo completamente y con cierta distancia. Imagina que estás viendo el recuerdo como un observador neutral desde una distancia segura y cómoda. Pregúntate qué puedes aprender de cada recuerdo. Registra tus pensamientos.
4. LIMPIA LA AUTOCRÍTICA
Fíjate en las palabras específicas que usas para criticarte a ti mismo. Toma un papel y lápiz y escribe las palabras autocríticas en la parte superior.
Luego, escribe todas las frases que te vienen a la mente y que usas para castigarte a ti mismo. No te censures. Repasa cada frase, con curiosidad, sobre sus orígenes.
A continuación, aclara completamente tu mente escuchando pasiva pero atentamente algún sonido mundano de tu entorno inmediato (el sonido del motor de una frigorífico, un ventilador, el zumbido de tu ordenador o del tráfico lejano). Una vez que estés listo y despejado, tira el papel.
5. DESARROLLAR RECURSOS
Finalmente, sumérgete en un recuerdo positivo, viendo lo que viste en ese momento, escuchando lo que escuchaste y sintiendo lo que sentiste. Imagina que muchos, muchos más de estos recuerdos positivos se esparcen en tu futuro.
Al terminar con una nota positiva y proyectando positividad en tu futuro, preparas el escenario para las cosas buenas que vendrán.
Las expectativas positivas y el optimismo están ligados a la salud y la longevidad.
La moraleja de la historia: Hazte cargo de tu salud emocional. Procesa conscientemente tus emociones. No permitas que el estrés dicte tu estado de ánimo. Cuando esto sucede, tu mente y tu cuerpo se convierten en un hábitat en el que es más probable que florezcan las enfermedades. Esto es un hecho comprobado.
Si no puedes completar la limpieza emocional por tu cuenta, busca ayuda y apoyo en el proceso. Es muy importante.