¿Qué son las proteínas?
Las proteínas forman parte de un complejo grupo de moléculas que realizan todo tipo de tareas en el organismo. Forman el pelo, las uñas, los huesos y los músculos. Las proteínas dan forma a los tejidos y a los órganos y también les ayudan a funcionar como deben. En resumen, las proteínas son uno de los componentes básicos que te convierten en quien eres.
Veamos cuáles son las principales funciones de las proteínas y cómo obtenerlas.
1. Energía de emergencia
Las proteínas no son la primera -ni la segunda- opción de tu cuerpo para obtener energía. Ese papel está reservado a los hidratos de carbono y las grasas. Pero cuando te quedas sin calorías, o si eres un atleta serio, agradece a las proteínas que te mantengan en marcha más allá del punto de las reservas normales de energía.
2. Constructoras de músculo
Necesitas proteínas para mantener el tamaño y la forma de tus músculos. Cuando pierdes peso, las proteínas evitan que pierdas músculo al mismo tiempo. Si levantas pesas para ganar fuerza, las proteínas son la clave para construir más músculo.
3. Fortalece los huesos
Los estudios demuestran que consumir la cantidad adecuada de proteínas en la dieta mejora la salud de los huesos. Reduce la probabilidad de padecer osteoporosis (pérdida de masa ósea) al ayudar a mantener la densidad ósea, y también ayuda a prevenir las fracturas a medida que se envejece.
4. Refuerza tu sistema inmunitario
Las proteínas están formadas por aminoácidos. Estos compuestos ayudan a convertir a los actores clave de tu sistema inmunitario -células T, células B y anticuerpos- en luchadores contra los gérmenes que detectan y eliminan las células dañinas que entran en tu cuerpo antes de que puedan iniciar una infección.
5. Reduce los antojos
Los antojos son diferentes a una verdadera necesidad de comida. Provienen del cerebro, no del estómago. Las investigaciones demuestran que consumir más proteínas puede ayudar a frenar estos antojos, incluso las incursiones nocturnas en la nevera.
6. Quema la grasa
Un nivel suficientemente alto de proteínas en tu dieta aumenta tu metabolismo (el ritmo al que su cuerpo utiliza las calorías). Esto significa que quemas más calorías al día -incluso en reposo- de las que quemarías con una dieta baja en proteínas.
7. Ayuda al corazón
Los estudios sobre las proteínas, en concreto las de origen vegetal, demuestran que pueden ayudar a reducir la presión arterial. También puede disminuir los niveles de LDL o colesterol malo, lo que reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas.
8. Cura las lesiones
Hay una razón por la que la proteína se llama el bloque de construcción de los tejidos y órganos del cuerpo. Acelera la reparación de las heridas reduciendo la inflamación y creando nuevo tejido en el lugar de la lesión.
9. Traslada los nutrientes
Si pensamos en el torrente sanguíneo como un canal, las proteínas son los barcos de carga que transportan vitaminas, minerales, azúcares, colesterol y oxígeno a través de él y hasta las células y tejidos que los necesitan para funcionar. Algunas proteínas incluso almacenan ciertos nutrientes, como el hierro, para que tengas un suministro de reserva cuando lo necesites.
¿Se pueden tomar demasiadas proteínas?
Una dieta rica en proteínas tiene claros beneficios, pero ¿puede ser perjudicial para la salud un exceso de ellas? Sí, y el coste podría ser un mayor riesgo de cáncer, colesterol más alto, cálculos renales, aumento de peso y estreñimiento.
Pero muchos de estos efectos potenciales dependen del tipo de proteína que consumas y de tu dieta en general. Pregunta a tu médico o nutricionista qué es lo mejor para ti.
¿Cuáles son las mejores formas de obtenerlas?
Las proteínas se presentan en muchas formas diferentes. Busca fuentes saludables y bajas en grasas. Evita las grasas saturadas y las opciones altamente procesadas. Trata de consumirlas a lo largo del día en lugar de meterlas en una sola comida. Mantén tus raciones de fruta y verdura para obtener muchas vitaminas, minerales y fibra.