8 poderosos pasos para el pensamiento positivo

Beneficios del pensamiento positivo

«El pensamiento positivo nos hace conscientes del hecho de que nuestros problemas nunca tuvieron vida propia. Se mantuvieron vivos gracias a nuestras fijaciones, intensa concentración y las increíbles cantidades de energía que les asignamos.» ~ Luminita D. Saviuc

La forma de pensar influye en la forma de sentir. Y la forma en que nos sentimos determina la calidad de todas nuestras acciones y comportamientos. Si los pensamientos que tenemos son sanos, fortalecedores y positivos, así será nuestra vida.

8 poderosos pasos para adoptar el pensamiento positivo.

1. El pensamiento positivo consiste en centrarse en lo que quieres, no en lo que no quieres

El error que comete mucha gente es hablar de sus problemas y frustraciones una y otra vez. En lugar de centrarse en el resultado final y en todas las cosas maravillosas que quieren tener y lograr en sus vidas, dan toda su energía y atención a lo que no quieren. Por lo tanto, crean más de aquello en lo que se centran: problemas y dolores de cabeza.

Si quieres desarrollar una mentalidad positiva, tienes que entrenar tu mente para que se aleje de lo que te molesta y se centre en lo que amas y quieres que ocurra en tu vida. Al hacerlo, no sólo crearás una mente más sana, sino también una vida más feliz.

2. Saber que cada problema viene con una lección

Siempre hay una lección en todo lo que nos sucede. Si quieres mejorar la calidad de tu pensamiento y crear una forma de vida más positiva y optimista, será conveniente que busques las lecciones en todo lo que te sucede y aprendas de ellas. Al hacerlo, descubrirás que nada en la vida te pasa a ti, sino que te pasa para ti.

3. Para desarrollar tu pensamiento positivo, no creas todo lo que piensas

Pensamos entre 60.000 y 70.000 pensamientos cada día, la mayoría de los cuales son aleatorios, tóxicos, negativos y autodestructivos. Y si caemos en la trampa de creer cada uno de estos pensamientos, lo más probable es que al final perdamos la cabeza.

No creas todo lo que piensas.

Observa tu mente. Observa tus pensamientos. Pero sé lo suficientemente sabio como para no identificarte con tus pensamientos, especialmente si son tóxicos y autodestructivos. Recuerda siempre que tú no eres tu mente. No eres tus pensamientos. Tú eres la Conciencia detrás de esos pensamientos.

4. Adopta una actitud de gratitud

Una gran manera de desarrollar el pensamiento positivo es expresar tu gratitud por todo lo que te sucede y por todo lo que te rodea llevando un diario de gratitud.

Al escribir las cosas por las que estás agradecido, creas el hábito saludable de buscar cosas que apreciar de ti mismo y de tu vida. Y cuando pruebes la alegría de ser agradecido, ya no querrás perder tu tiempo y energía en pensamientos, personas y experiencias estresantes, caóticas y dolorosas.

5. Aumenta tu pensamiento positivo dejando de lado tu necesidad de perfección

Es imposible alcanzar la perfección. De hecho, fue Voltaire quien afirmó que lo perfecto es enemigo de lo bueno. La perfección no deja lugar a la mejora, así que ¿por qué hacerse daño intentando ser perfecto?

Cuando intentas hacerlo todo a la perfección, analizando en exceso y permitiendo que tus pensamientos temerosos y furtivos te guíen a ti y a tus acciones, tu cuerpo entra en modo de supervivencia.

Y cuando tu cuerpo está en modo de supervivencia, realmente no puedes crear «perfección», sólo más dolor y frustración.

6. Hay una razón para todo

Haz las paces con la idea de que todo en la vida sucede por una razón, que todo sucede para ti, no por ti. Y al hacerlo, los pensamientos que correrán por tu mente y los sentimientos que sentirás en tu cuerpo ya no estarán impregnados de miedo, duda, pánico y ansiedad, sino de fe, amor y entrega.

7. Para potenciar tu pensamiento positivo, deja ir tu resistencia

La resistencia es uno de los mayores enemigos del pensamiento positivo. Cuando te resistes a ti mismo, a tu vida y al mundo entero, traes el caos a tu mente y la enfermedad a tu cuerpo; tus pensamientos se vuelven caóticos y tu cuerpo empieza a responder a todos esos pensamientos insanos creando desequilibrios y todo tipo de dolores y enfermedades.

Cuando te permites simplemente ser – ir con la corriente, ya no en contra de ella, soltar la resistencia y volver del caos al equilibrio, al orden y a la armonía, descubres que la vida nunca estuvo destinada a ser una lucha y que tus pensamientos nunca estuvieron destinados a ser los dueños de tu vida, ¡Tú lo fuiste!

8. Aprende a estar presente en todo lo que haces

Deja el pasado en el pasado y el futuro en el futuro. Elige estar presente aquí y ahora.

Si te quedas demasiado atrapado en tu mente, si piensas demasiado en lo que pasó en el pasado y en lo que puede pasar en el futuro, lo más probable es que generes mucho dolor y sufrimiento. Y la energía que generarás (que, por cierto, es contagiosa) será tóxica y perjudicial, para ti y para tus seres queridos.

Tu vida está aquí y ahora, delante de tus ojos. No huyas de ella. Reconócela. Haz las paces con ella. Acógela. Participa en ella. Y al hacerlo, pasarás de sentirte una víctima de tus pensamientos, sentimientos y comportamientos, a darte cuenta de que eres un poderoso creador y el dueño de tu propia vida.

Y estos son los 8 pasos para el pensamiento positivo. Espero que te inspiren a dejar de lado todos tus pensamientos insanos y autodestructivos. Y espero que te den el poder de disciplinar tu mente para que piense y adopte sólo aquellos pensamientos que dan vida y te dan poder.

¿Y tú? ¿Cómo mantienes tu mente positiva cuando las cosas no van como quieres? ¿Y cuando surge el estrés y la vida te envía personas y experiencias desafiantes? Puedes compartir tus ideas uniéndote a la conversación en la sección de comentarios más abajo.