Desamorarse: Introducción
El amor puede ser a veces totalmente inconveniente. Tal vez te has enamorado de alguien que no te quiere, o todavía tienes fuertes sentimientos por un ex aunque hayas terminado la relación. O tal vez estás felizmente con alguien pero luchando con la atracción hacia alguien más.
¿Qué puedes hacer si tu corazón es empujado en una dirección muy contraproducente?
Primero, déjame decir lo obvio: Nuestros corazones tienen mentes propias, así que no podemos decidir exactamente cuando empezar o dejar de amar a alguien.
Dicho esto, podemos tener más control sobre nuestros sentimientos de lo que pensamos. Las emociones, los pensamientos y las acciones están estrechamente vinculados, como enfatizo en mi enfoque “Piensa, actúa, sé“. Podemos influir en nuestros sentimientos dirigiéndonos a nuestros patrones de pensamiento y conductas, que están más directamente bajo nuestro control.
Aquí hay algunas técnicas que pueden ayudarte a desenamorarte.
1. Evita el contacto con la persona si es posible
La atracción romántica es muy similar a la adicción en muchos aspectos, y puede que necesites un período de desintoxicación para sacar a la persona de tu sistema. La abstinencia puede ser dolorosa al principio; pero con el tiempo te agradecerás a ti mismo por crear el espacio que necesitabas para romper la adicción.
El “contacto” con la persona incluye revisar sus últimas publicaciones. Lo sé, sólo quieres ver qué han estado haciendo o si han encontrado a alguien nuevo. Resiste la tentación.
3. Practica la conciencia consciente de tus emociones
Parte de la atención plena es dar un paso atrás y observar nuestros sentimientos, en lugar de perderse en ellos. Reconocer que las emociones no te definen, y en un sentido real no eres tú – son experiencias que estás teniendo, y ciertamente no tienes que actuar sobre ellas.
4. Ten en cuenta tus elecciones de música
Fíjate si la música que escuchas te anima a dejar ir o te hace volver. Resiste el impulso de escuchar música que refuerce tu apego emocional.
5. Ten curiosidad por tu atracción
¿Era realmente la otra persona? ¿O sobre una necesidad que parecía satisfacer en ti? ¿O quizás sobre la persona que imaginabas que serías? A menudo nos sentimos atraídos por la persona porque nos gusta lo que somos a su alrededor. Considera que tu atracción tiene al menos tanto que ver contigo como con la otra persona.
6. Quítate las gafas de color rosa
Presta atención a tus pensamientos sobre esta persona, que probablemente sean irrealmente positivos. Ya sea que no la hayas conocido lo suficiente como para descubrir sus defectos o que sólo hayas olvidado temporalmente sus deficiencias, explora la posibilidad de que la persona idealizada por la que suspiras pueda ser en gran parte una fantasía.
Y finalmente, ten compasión de ti mismo. No te castigues si sientes el impulso de revisar la página de Facebook o la cuenta de Instagram de la persona, por ejemplo. Es difícil cuando no puedes estar con alguien que realmente te importa. Sólo recuerda que la mayor bondad hacia ti mismo puede ser practicar los pensamientos y acciones que te permiten dejar ir.
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