¿Qué es el escaneo corporal?
El escaneo corporal -el acto de tomar conciencia y relajar todas las áreas del cuerpo- es una excelente manera de ayudar a calmar el cuerpo físico y, a su vez, la mente.
Y según la sofróloga Niamh Lyons, fundadora de American Sophrology, el escaneo corporal también puede ser una forma poderosa de acceder al subconsciente.
Cómo escanear la mano derecha para relajarse en minutos
Si no estás familiarizado con la sofrología, se trata de una modalidad de salud alternativa que se popularizó en Europa en la década de 1960. Se trata de aprovechar el poder de la mente para relajar el cuerpo.
Según explicó Lyons, sus sesiones siguen este formato: Los clientes empiezan con unos minutos de respiración, luego los guía a través de un escaneo corporal completo, seguido de más respiración. Y finalmente, una vez que el cliente se encuentra en un estado de relajación total, se le guía a través de prácticas como la visualización y el trabajo de sombras.
En una sesión normal, un sofrólogo te guiaría a través del escaneo (ahora también hay audiolibros para esto), pero aquí está lo esencial de cómo hacer uno, centrándose primero sólo en la mano derecha.
Nota: Deberás calentar con un par de minutos de inhalación contando hasta tres, manteniendo hasta tres y exhalando durante seis.
- Siéntate cómodamente sin cruzar los brazos ni las piernas, con los ojos cerrados. Exhala lentamente por la boca, como si estuvieras apagando lentamente una vela. Inspira por la nariz, exhala por la boca lentamente y empieza a relajar conscientemente el cuerpo: los hombros, el pecho, el estómago, los brazos y las piernas. Continúa respirando a tu propio ritmo.
- Coloca las manos con las palmas hacia abajo sobre las piernas o la superficie que tengas delante, con los ojos aún cerrados. Lleva tu conciencia a la mano derecha, notando el aire alrededor de la parte superior de la mano, la temperatura, como si la notaras por primera vez, con curiosidad, como un niño. Observa cualquier sensación. Tome conciencia de la superficie que hay debajo de la palma de la mano y de la sensación de tocarla.
- Toma conciencia de tu dedo meñique. Relaja conscientemente, los nudillos y los músculos. Toma conciencia de la longitud del dedo meñique, de la superficie de arriba y de la de abajo. Observe la uña del dedo. Relaja el dedo.
- Ahora, traslada la atención al cuarto dedo. Relaja conscientemente el cuarto dedo, notando su longitud, hasta la uña. Relaja conscientemente los músculos y los huesos. Ahora el dedo medio, relajando el dedo medio hasta la punta del dedo. Ahora, el dedo índice, relajando los músculos y los tendones, los huesos. Toma conciencia de la forma del dedo índice. Y ahora el pulgar, relajando toda la longitud del pulgar.
- Pon tu atención ahora a la muñeca, la parte superior y la inferior. Toma conciencia de la parte superior de la mano derecha, luego de la parte de la palma y después de la muñeca, hasta llegar a la punta de los dedos.
- Ahora compara tu mano derecha con la izquierda. Compara el tamaño, el peso, las sensaciones y la temperatura.
Explorar sólo las manos puede ser una práctica rápida e independiente. Pero si quieres ir más allá, puedes aplicar esas mismas técnicas de exploración a todo el cuerpo, trabajando de abajo a arriba.
El beneficio de este escaneo corporal hiperfocalizado
Como explica Lyons, «con sólo relajar conscientemente la mano derecha, estás dando energía a tu mano derecha«. Estás desviando tu atención de tus pensamientos, lo que puede ayudar a promover sentimientos de relajación y presencia.
Y cuando alcanzas este estado de zen, en el que llegas a un lugar entre la vigilia y el sueño (casi como la hipnosis), añade Lyons, puedes empezar a profundizar.
«Empiezas a acceder a los recuerdos y al pasado, e incluso a las emociones«. Aquí tienes algunas prácticas que puedes utilizar para seguir tu exploración relajante:
- Curación del niño interior.
- Rituales de liberación.
- Entrenamiento cerebral.
- Ejercicios de concentración.
- Meditar sobre proyectos o planes futuros.
- Superación de un miedo o fobia.
- Técnicas de visualización.
En resumen
El escaneo corporal aislado es simplemente una forma maravillosa de llevar el cuerpo -y la mente- a un estado total de relajación siempre que lo necesites. Desde ese lugar de calma, el cielo es el límite.