¿Qué son los hongos en las uñas de los pies?
Los hongos en las uñas de los pies son una infección que entra a través de las grietas de la uña o de los cortes en la piel. Puede hacer que la uña del pie cambie de color o se vuelva más gruesa.
También puede doler. Como los dedos de los pies suelen estar calientes y húmedos, los hongos crecen bien allí. Diferentes tipos de hongos y a veces levaduras afectan a diferentes partes de la uña. Si no se trata, la infección puede extenderse a otras uñas de los pies, a la piel o incluso a las uñas de las manos.
Síntomas
Las uñas infectadas suelen ser más gruesas de lo normal y pueden estar deformadas o tener una forma extraña. Pueden romperse con facilidad. Las uñas con hongos pueden tener un aspecto amarillo.
A veces aparece un punto blanco en la uña que luego aumenta de tamaño. Cuando los hongos se acumulan bajo la uña, pueden aflojar e incluso separar la uña del lecho. Los hongos también pueden extenderse a la piel que rodea la uña.
¿Quiénes tienen hongos en las uñas de los pies?
Los hombres son más propensos a contraerlos que las mujeres. Además, cuanto mayor sea la persona, mayores serán sus posibilidades.
Las personas que tienen diabetes, pie de atleta o un sistema inmunológico débil, que fuman o cuyos familiares lo tienen también corren un mayor riesgo. Si pasas mucho tiempo en el agua o te has lesionado la uña del pie, tus probabilidades de contraer hongos en las uñas aumentan.
Obtén un diagnóstico
Dado que los hongos en las uñas de los pies pueden parecerse a otras enfermedades, como la psoriasis, es conveniente que un médico te examine las uñas.
Es posible que tengas que acudir a un especialista que se ocupe de los pies (un podólogo) o de la piel (un dermatólogo). Es posible que le raspen parte de la parte afectada y la envíen al laboratorio para averiguar la causa del problema.
Cómo tratar los hongos en las uñas de los pies
La forma de tratar los hongos en las uñas de los pies depende del hongo que tengas y de la gravedad de la infección. El médico puede probar una de estas cosas o una combinación de ellas:
- Una crema tópica que se aplica directamente sobre la uña
- Una laca de uñas tópica
- Una píldora antifúngica recetada
- Un tratamiento con láser que elimine la zona dañada de la uña o de la piel
En algunos casos, puede ser necesario extirpar la uña por completo con una cirugía.
Cuidar los dedos de los pies
Utiliza agua y jabón para lavar tus pies, y sécalos bien, incluso entre los dedos. Córtate las uñas de los pies, en línea recta, para mantenerlas más cortas que el extremo del dedo. Asegúrate también de que las herramientas que utilizas están limpias.
Lava los cortaúñas y las limas con agua y jabón, y luego límpialos con alcohol. Puede que tengas la tentación de cubrir las uñas descoloridas con esmalte, pero no lo hagas. El lecho ungueal no puede «respirar», lo que impide que los hongos desaparezcan.
Mantén los pies secos y limpios
Sé inteligente con tu calzado. Elige calcetines que absorban la humedad. Cámbialos regularmente. Asegúrate de que tus zapatos te queden bien. Deben ser de un material que permita el paso del aire, como lona, malla o cuero. Utiliza zapatillas de ducha en lugares públicos húmedos como vestuarios y piscinas.
Conoce tus dedos
Examina bien el lecho ungueal y la piel que rodea las uñas de los pies con regularidad, al menos una vez al mes. (Es posible que tengas que utilizar un espejo si te resulta difícil ver los dedos de los pies).
Observa si hay cambios de color y textura, así como si hay cortes o daños. ¿Te duele algo? Si los síntomas no mejoran o empeoran, llama a tu médico.